5 de junio de 2013

HASTA SIEMPRE Y HASTA LA ETERNIDAD



Las 0,18. Acaba de empezar un nuevo 5 de Junio. Aquí estamos cruzando el año 2013. 


El año pasado, tuve que saltarme este día porqué tu ya sabes que estaba metida en un torbellino de obras, papeleos, medio viviendo en una habitación de la Fonda del pueblo y ni sé de dónde he sacado la fuerza necesaria para que ya casi todo esté en su lugar. 


Hoy aquí tendrías 95 años. En tu otra dimensión, el pasado 30 de Marzo tan sólo eres un niño de tres años. Un angelito bromista y cariñoso que seguro has hecho grandes amigos celestiales con quienes debes aliarte para ayudaros mutuamente a cuidar de estos diablillos que dejasteis en el planeta Tierra. Te quiero tanto ¡! …… sabes bien que eres mi luz en los días y noches de oscuridad y el único confidente de mis soledades, mis miedos y mis considerables desesperanzas.

Esta mañana te he puesto triste y lo sé. Jamás me hubiese derrumbado tanto para hacerte daño pero en realidad ha sido una jornada terrorífica. De aquellas en que piensas que no tenías que haberte levantado de la cama. Yo sé que tú nunca supiste de mis enormes esfuerzos por salir adelante con las niñas sin pedirte nada. Nunca supiste de mis recaídas llena de medicación que tuve que tomar durante años porqué ni físicamente, ni anímicamente,  era capaz de soportar tanta carga a cuestas siendo yo una mujer realmente débil y, ahora sé que muy sensible. Pero ahora sí. Ahora me ves a todas horas. Eres como otro ojo de Dios a quién no puedo ocultarle nada. Las mentiras piadosas ya no valen en nuestra interconexión.


Y tal como te he contado esta mañana entre lágrimas, estoy cansada papa. Estoy muy cansada de sobrevivir. Me pregunto una y mil veces ¿qué hago aquí?? ¿qué espero? ¿para qué sirvo? .. me siento tan inútil y tan prescindible que poco a poco he ido descubriendo para qué quería este piso y en qué lo estoy usando. Buscaba una cueva de donde apenas salgo. Me paso días sin salir y tan sólo adorando el mar, los barcos, las gaviotas y las golondrinas de la tarde desde la terraza. Le digo buenos días al sol y, cada noche, me despido de la noche y las estrellas antes de irme a dormir. No sé vivir para mí sola papa. Tú lo sabes bien. Soy feliz dándolo todo a otras personas que me necesiten y, hace mucho tiempo, todos me han dejado en el olvido. 


Tú me ves cuando me apunto a cualquier cosa para ir andando ¿hacia dónde? …. Hacia una residencia cuando no pueda más, donde también moriré en el olvido de todos. Y por eso apenas salgo, hay días que ya ves necesito dormir y dormir sin que nada me importe. Debes estar muy enfadado conmigo porqué tampoco estoy comiendo como debo pero no tengo apetito. Muchas veces tampoco siento sed. En realidad estoy acostada en la nada simplemente esperando …. Y así ya ves que el piso todavía no está ordenado del todo. ¿Y para qué? Nadie me visita. A nadie le importa si todavía tengo ropa por planchar. 


No sé si ahora te es posible ver los tres tiempos de la vida: presente, pasado y futuro pero, si así fuera, quizás sepas si me espera todavía alguna cosa buena por la que vivir o seré como una vela que se irá consumiendo hasta apagarse ahogada en su propia cera. Por favor, no te entristezcas papa. Pase lo que pase es mi vida. La que me ha tocado y la que me ha agotado desde muy temprana edad. Tú sigue ahí, a mi lado siempre. Acaricia mi pelo cuando duerma y sigue dándome tu beso de buenas noches. Acompáñame como lo haces a menudo en mis sueños. Por las mañanas recuerdo que estabas ahí, en mis entresijos de madejas tempraneras. 


Esta noche voy a encenderte una velita blanca y prender un perfumado incienso para celebrarlo contigo. Perdona si estoy llorando pero es que ….. te quiero tanto!!!
Es algo que no todos pueden decir: hasta siempre y hasta la eternidad. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario